MEDIUMNIDAD
En el intercambio espiritual muchos compañeros están necesitados de especial atención, esto es porque son médiums que inician el camino de la mediúmnidad.
La mediúmnidad, siendo una facultad natural, eclosiona o surge en la época apropiada, definida en el planeamiento reencarnatorio del individuo.
Siendo natural, aparece espontanea. Otras veces, surge como impositivo de prueba mediante el cual es posible más amplia liberación del propio médium, que dilatando el ejercicio de ennoblecimiento al que se dedica, granjea consideración y títulos de beneficencia que le da paz.
La eclosión mediúmnica puede , ocurrir bajo dos formas:
Espontanea- sin generar al médium iniciantes mayores trastornos, sean físicos o emocionales.
Y la de prueba – donde el médium presenta desordenes emocionales que alcanzan su organización física. Pudiéndole ocurrir perturbaciones emocionales.
Esta forma es la más común del surgimiento de la mediúmnidad en el estado evolutivo que aun nos encontramos.
El surgimiento de la facultad mediúmnica no depende, del lugar, edad, condición social o sexo.
Puede surgir en la infancia, en la adolescencia, o en la juventud, en la edad madura o en la vejez.
Puede revelarse en el Centro espirita, en casa, en los templos de cualquier denominación religiosa y en el materialista.
Las señales, o síntomas que anuncia la posesión de la mediúmnidad varían infinitamente. Pueden ser reacciones emocionales insólitas. Aparente sensación de enfermedad. Escalofríos y malestar. Irritaciones extrañas.
Cuando aparece la mediúmnidad surgen disturbios variados, sean en el area orgánica, a través de desequilibrios y enfermedades o mediante inquietudes emocionales y psíquicas, por debilidad de su constitución fisiopsicológica (del médium)
No es la mediúmnidad la que genera el disturbio en el organismo, sino la acción fluídica de los Espíritus que favorece la alteración de la distonía o no, de acuerdo con la cualidad que esta reviste.
Muchos de ellos, fascinados por el entusiasmo excesivo, ante el impacto de las revelaciones espirituales que los visitan de lleno, solicitan el entendimiento y el apoyo n de las personas experimentadas, para que no se pierdan a través del engaño.
Para cada médium urge el deber de estudiar para poder discernir y, trabajar para merecer, tanto como para nosotros.
Admitidas las construcciones de orden superior, el médium, es invitado al discernimiento y a la disciplina, para que se le aclaren y perfeccionen , las facultades, cabiéndole apartarse de quererlo todo y querer hacer todo, a lo que somos llamados todos nosotros, cuando estamos aun inmaduros en la vida, por lo que acostumbran a la rebeldía y a la perturbación.
Hay que ayudar a los médiums iniciantes a que perciban que en la mediúmnidad como en cualquier otra actividad terrestre, no hay conocimiento real donde el tiempo no consagró a aprendizaje y que todos los encargos son nobles donde la luz de la caridad preside las realizaciones.
Por eso los que saben deberán conducirlos a que se esclarezcan en los principios saludables y libertadores de la Doctrina Espirita.
Mediums para fenómenos surgen en todas partes y de todas las posiciones. Mediums para la edificación del perfeccionamiento y de la felicidad entre las criaturas, son solo aquellos que se hacen auténticos servidores de la humanidad.
Las casas espiritas ofrecen campo para el estudio y la educación de la mediúmnidad a todos aquellos que desean servir en la siembra de Cristo en ese área.
Si eres médium y necesitas encauzar tu vida en la senda del espiritismo, acude a un centro donde puedan ayudarte y si no es así, procura la codificación Espirita y estudia el libro de los médiums, para poder dirigir tu mediúmnidad de forma eficiente y no perderte en el laberinto de la obsesión, siendo presa de los espíritus ignorantes, que no desean tu progreso.
MERCHITA ( este articulo lo extraje del estudio y educación de la mediúmnidad, de la federación espirita brasileña)
*************
¿ Cómo se puede distinguir un caso de recuerdo espontáneo de vidas pasadas, de otro de Obsesión o Posesión?.
Es
de subrayar que la
Posesión,
se refiere a un grado mayor de obsesión o de influencia espiritual
negativa , pero la realidad de la misma nada
tiene que ver con las posesiones diabólicas que admiten las
religiones.
A veces puede parecer difícil diferenciar
entre el caso de un Espíritu que estando encarnado como Ser humano,
manifiesta espontáneamente o mediante hipnosis, recuerdos de vidas
anteriores en donde se le manifiesta otra personalidad o
personalidades si son varias las existencias humanas recordadas, y
entre el caso diferente de un Espíritu desencarnado que ya está en
el plano espiritual (mental) que le corresponde y se manifiesta a
través de una mediumnidad, desplazando del todo o en parte al
Espíritu de su víctima encarnada, de un modo habitual y hasta
constante.
La
reencarnación y la posesión son las explicaciones alternativas para
todos aquellos casos en que una personalidad aparece para ocupar o
asumir la de otro sujeto. Hay
que señalar que entre los casos de Obsesión o Posesión y los de
Reencarnación existe una diferencia importante, y es que en
los de Reencarnación, como mas adelante veremos, el Espíritu
siempre es el mismo Ser que para regresar a este mundo, lo hace cada
vez bajo una nueva personalidad humana, tomando cada vez un cuerpo
físico con el que podrá relacionarse y evolucionar durante su
vida en la Tierra. En esta clase de manifestaciones las
personalidades que aparecen lo hacen sucesivamente en un tiempo
pasado, en diferentes épocas, sin mezclarse unas con otras , ni con
la actual de la persona que recuerda bajo trance sus vidas pasadas,
mientras que en los casos de Obsesión, cualquiera que sea su
intensidad, el espíritu obsesor manifiesta una personalidad
humana diferente de la de su víctima y que se suele mezclar en el
presente con la de ella, apareciendo ambas indistintamente
entremezcladas. En los casos de Obsesión mas complejos, a veces
son varios los espíritus asediantes, pues en esos casos raramente
actúa uno solo.
El cuerpo físico del obsesado , como el de todo ser
humano, fue diseñado y forjado solo para él, así como
planificado para vivir una vida mas o menos larga o corta en este
mundo, por tanto nadie más que él, lo puede “habitar” hasta el
momento de su desencarnación. Sin embargo en el poseído, la
personalidad o personalidades extrañas del Ser que se manifiesta,
nada tienen que ver con la de la persona poseída ..
La diferencia entre los auténticos casos de
reencarnación y los de posesión, también estriba en que si es un
caso de memoria del pasado, el sujeto recuerda los detalles de
alguna existencia humana anterior, permaneciendo mientras tanto
consciente de su personalidad presente, mientras que en el “poseido”
no se manifiesta, sino que lo hacen una o varias personalidades a la
vez, en un tiempo presente y sin la consciencia personal de la
víctima.
La posesión, que es un grado muy fuerte de obsesión,
acontece cuando un Ser desencarnado, por cuestiones de venganza hacia
la persona poseída o hacia otras personas cercanas a la misma, es
capaz de desplazar a la víctima de su propio cuerpo físico por
tener mayor poder psíquico que él, pero nunca el desplazamiento
del “poseído” es total, pues sigue unido a su organismo físico
por el “cordón de plata” o lazo de energía que une su organismo
periespiritual con el físico; si así no fuese y el desplazamiento
de su cuerpo fuese total, sin ningún lazo de unión, la separación
sería definitiva y le sobrevendría la muerte.
El obsesor, llevado por su malignidad y su mayor fuerza
psíquica, se manifiesta a través del cuerpo físico de la víctima,
y normalmente lo hace de forma violenta y compulsiva, buscando
dañarle psíquica y físicamente.
Los
llamados “Exorcismos”
que practican algunas religiones, funcionan en cuanto el Ente invasor
llega a creer y a temer la eficacia del ritual religioso que se le
aplique para echarlo; si no es así, el fracaso de estos rituales
suele ser total. Lo único que puede hacer a un Espíritu obsesor
dejar en paz a su víctima, es un adoctrinamiento moral impartido
por alguien espiritualmente superior a él, que le ayude a razonar y
lo sensibilice del error que comete con su acción malévola,
enseñándole como el único camino cierto en su situación, el del
arrepentimiento y la práctica del bien, como indispensable para
alcanzar finalmente su propia felicidad.
- Jose Luis Martín-
*******************
“Las
enfermedades mentales deben ser atribución de los filósofos y no de
los médicos, porque ellas son enfermedades del alma”.
-
Kant -
***************
Poema de Gratitud
Señor Jesús, ¡ muchas gracias!
Por el aire que nos das,
por el pan que nos diste,
por la ropa que nos viste, ,
por la alegría que poseemos,
por todo de lo que nos nutrimos.
Muchas gracias, por la belleza del paisaje,
por las aves que vuelan en el cielo añil,
¡por Tus dadivas mil!
¡Muchas gracias, Señor!
Por los ojos que tenemos...
ojos que ven el cielo, que ven la tierra y el mar,
¡ que contemplan toda la belleza!
Ojos que se iluminan de amor
ante el majestuoso festival de color
¡de la generosa Naturaleza!
¿Y los que perdieron la visión?
Déjame rogar por ellos
¡A Tú noble Corazón!
Yo sé que después de esta vida,
más allá de la muerte,
volverán a ver con una alegría incontenida...
Muchas gracias por mis oídos
por los oídos que me fueron dados por Dios.
Agradecida, Señor, porque puedo escuchar
Tú nombre sublime y, así, puedo amar.
Agradecida por los oídos que registran:
la sinfonía de la vida, en el trabajo, en el dolor, en la lidia
el gemido y el canto del viento en las ramas del olmo,
las lágrimas doloridas del mundo entero.
y la voz lejana del cancionero...
¿Y los que perdieron la facultad de escuchar?
Déjame por ellos rogar...
Yo sé que en Tú Reino volverán a soñar.
.
.
Agradecida, Señor, por mi voz.
Pero también por la voz que ama,
por la voz que canta,
por la voz que ayuda,,
por la voz que socorre,
por la voz que enseña,
por la voz que ilumina...
Y por la voz que habla de amor,
¡agradecida, Señor!
Me acuerdo, sufriendo, de aquellos
que perdieron el don de hablar
¡y tu nombre siquieran pueden pronunciar!...
Los que viven atormentados en la mudez.
y no pueden cantar ni a la noche, ni al día...
Yo suplico por ellos,
sabiendo que más tarde, .
en Tú Reino, volverán a hablar
Agradecida, Señor, por estas manos, que son mía.
alabanzas de la acción, del progreso, de la redención.
Agradezco las manos que indican adioses,
por las manos que dan ternura,
y que socorren en la amargura;
por las manos que acarician
por las manos que elaboran las leyes
y por las que las heridas cicatrizan
rectificando las carnes partidas,
¡ a fin de que disminuyan los dolores de muchas vidas!
Por las manos que trabajan el suelo,
que amparan el sufrimiento y paran lágrimas,
por las manos que ayudan a los que sufren,
por las manos que ayudan a los que sufren,
los que padecen...
Por las manos que brillan en estos trazos, !
¡como estrellas sublimes iluminando en mis brazos!
... Y por los pies que me llevan a marchar,
erecta, firme para caminar,
pies de la renuncia que siguen
humildes y nobles sin protestar.
Y los que están amputados, estropeados
los heridos y los deformados,
los que están retenidos en la expiación,
por crímenes practicados en otra encarnación.
Yo ruego por ellos y puedo afirmar
que en Tú Reino, después de la lidia
de esta dolorosa vida,
podrán bailar.
y en transportes sublimes con sus brazos también acariciar.
Sé que allá todo es posible
cuando Tú quieres ofrecer,
¡incluso lo que en la Tierra parece increible!
Agradecida, Señor, por mi hogar,
el rincón de paz o escuela de amor,
la mansión de gloria el pequeño cuartito,
¡el palacio o la casa en ruina, el tugurio o la casa de miseria!
Agradecida, Señor, por el amor que yo tengo y
por el hogar que es mío...
Pero, si yo siquiera
ni un hogar allá tuviera, el techo amigo para abrigarme
ni un hogar allá tuviera, el techo amigo para abrigarme
ni otra cosa para acomodarme,
si yo no poseyera nada,
sino los caminos y las estrellas del cielo,
siendo el lecho de reposo y la suave sábana,
siendo el lecho de reposo y la suave sábana,
si a mi lado nadie existiera, viviendo y llorando sola, al descubierto...
Sin nadie para consolarme
diré, cantaré aun:
Agradecida, Señor,
porque Te amo y sé que me amas,
porque me diste la vida
jovial, alegre, por Tú amor favorecida...
Gracias, Señor, porque nací,
Gracias, Señor, porque creo en Ti...
Gracias, Señor, porque creo en Ti...
...Y porque me socorres con amor,
Hoy y siempre,
¡Agradecida, Señor!
Divaldo Pereira Franco por Amélia Rodrigues - Espiritu
Divaldo Pereira Franco por Amélia Rodrigues - Espiritu
***********************************
No hay comentarios:
Publicar un comentario