De corazón a corazón
ASTOLFO OLEGÁRIO DE OLIVEIRA FILHO
De Londrina
Respuesta a una jovem madre preocupada
Una jóven madre me planteó la siguiente cuestión: ¿ Por qué es tan importante cuidar la evangelización de nuestras criaturas?
Es conocida la postura de Kardec, el Codificador del Espiritismo, en relación a la enseñanza moral contenida en el Evangelio: " Ante ese código divino, la propia incredulidad se curva. Es el terreno en que todos los cultos pueden encontrarse, la bandera bajo la que todos pueden guarecerse, por más diferentes que sean sus creencias, porque nunca fue objeto de disputas religiosas, siempre y por todas partes, provocadas por los dogmas" (Cf. El Evangelio segñun el Espiritismo, Introducción, item I ).
Tras estas sabias palabras, Kardec aseveró: “Para los hombres, en particular, es una regla de conducta, que abraza todas las circunstancias de la vida privada y pública, el principio de todas las relaciones sociales fundadas en la más rigurosa justicia. Es, al fin y sobre todo, el camino infalible de la felicidad a consquistar, una punta del velo levantada sobre la vida futura".
Ahí está, pues, el punto central de la respuesta a la pregunta formulada.
Evangelizar a una persona es enseñarle el camino que lleva a la paz, la armonía, la felicidad posible en el mundo en que vivimos. ¿Y cuando debe comenzar tal taréa?. La respuesta a esta duda es también por demás conocida: en la infancia, ese periodo de la existencia corpórea que Emmanuel conceptuó así:
Los Espíritus superiores nos enseñan que, encarnándose con objeto de perfeccionarse, el Espíritu durante la infancia "es más accesible a las impresiones que recibe, capaces de auxiliarles en el adelantamiento, para lo que deben contribuir quienes les atañe su educación"
Los niños son los seres "que Dios manda a nuevas existencias".
"Para que no les puedan imputar excesiva seriedad, les da todos los aspectos de la inocencia.
Juzgando a sus hijos, buenos y dóciles, los padres dedican toda su afección y los rodean de los más minuciosos cuidados. La delicadeza de la edad infantil los torna blandos, accesibles a los consejos de la expriencia y de los que deben hacerlos progresar. En la fase infantil se les puede reformar el caracter y reprimir sus malas tendencias. Ese es el deber que Dios confió a los padres, misión sagrada por la que tendrán que responder" (Libro de los Espíritus, cuestiones 383 y 385).
Hasta los siete años, el Espíritu aún se encuentra en fase de adaptación para la nueva existencia. Aún no existe una integración perfecta entre él y la materia orgánica. Sus recuerdos del plano espiritual son, por esto, más vivos, volviéndose más susceptible de renovar el caracter y establecer nuevo camino. Pasada la época infantil, alcanzada una mayor edad, solo el proceso violento de las pruebas rudas en el mundo, puede renovar el pensamiento y las concepciones de las criaturas, por cuanto el alma encarnada habrá retomado su patrimonio nocivo del pasado y reincidirá en las mismas caidas, si le faltó la luz interior de los sagrados principios educativos".( El Consolador, pregunta 1009)
Tomado de " El INMORTAL"
JORNAL DE DIVULGACIÓN ESPÍRITA
Director Responsável: Hugo Gonçalves Año 53 Nº 624 Febrero de 2006
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Dios envía a los espíritus para que instruyan a los hombres, pero lo hace con el fin de que se esclarezcan acerca de sus deberes, así como para mostrarles el camino en el que podrán abreviar sus pruebas y, de esa manera, apresurar su adelanto. Ahora bien, del mismo modo que el fruto llega a madurarse, también el hombre alcanzará la perfección. No obstante, junto a los espíritus buenos, que desean vuestro bien, también hay espíritus imperfectos, que desean vuestro mal. Mientras que aquellos os impulsan hacia adelante, estos os empujan hacia atrás. Por eso debéis poner toda vuestra atención para saber distinguirlos. La forma es sencilla: sólo tratad de comprender que de un espíritu bueno no vendrá nada que sea perjudicial, y que todo lo que sea malo sólo provendrá de un espíritu malo. Si no escucháis los sabios consejos de los espíritus que os quieren bien, si os ofenden las verdades que os transmiten, es evidente que quienes os inspiran son espíritus malos. Sólo el orgullo puede impedir que os veáis tal como sois. Con todo, si vosotros mismos no lo veis, otros están viéndolo por vosotros. Así, os reprueban los hombres, que se burlan de vosotros por detrás, y también los espíritus.
Un espíritu familiar
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| Arzobispo Elder Camara |
Brasil
Recientemente fue lanzado al mercado cultural un libro mediúmnico con reflexiones de un sacerdote después de la muerte, atribuido justamente al Espíritu Dom Helder Camara, obispo católico, arzobispo emérito de Olinda y Recife, que falleció el 28 de agosto de 1999, en Recife (PE) BRASIL. El libro psicografiado por el médium Carlos Pereira, de la Sociedad Espírita Ermance Dufaux, de Belo Horizonte, causó mucha sorpresa entre los espiritistas y una gran controversia entre los católicos. Lo que causó más asombro entre todos fue la participación de Marcelo Barros, monje beneditino y teólogo, quien durante nueve años fue secretario de Dom Helder Camara, para la relación ecuménica con las iglesias cristianas y de otras religiones. Marcelo Barros fue secretario de Dom Helder Camara en el período 1966 a 1975 y tiene 30 libros publicados. Al prefaciar el libro “Novas Utopías”, del espíritu Dom Helder, reconociendo así la autenticidad del comunicante, por la originalidad de sus ideas, y también por el lenguaje adoptado, es como si la Iglesia Católica viniera a reconocer públicamente el error en el cual incurrió muchas veces, negando la veracidad del fenómeno de la comunicación entre los vivos y los muertos, y también eso dio al libro de Carlos Pereira, toda la fe necesaria como si fuera el visto bueno del Vaticano. Es importante destacar, todavía que los derechos de autor del libro fueron divididos en partes iguales, la donación hecha por el médium fue para la Sociedad Espírita Ermance Dufaux y al Instituto “Dom Helder Camara” de Recife, que, por cierto, fue aceptado por la institución católica, sin ningún tipo de resentimiento.
En el prólogo del libro aparece también el aval del filósofo y teólogo Ignacio Strieder y la opinión favorable de la historiadora e investigadora Jordana Gonçalves Leão, ambos vinculados a la Iglesia Católica. Como ellos mismos dijeron, esta obra quizás no sea una producción dirigida a los espiritistas, quienes ya viven con el fenómeno de la comunicación, desde la codificación del Espiritismo, pero si, para una gran parte de la población dentro de la militancia católica, que está llamada a conocer la verdad espiritual, porque "los tiempos han llegado," estas enseñanzas pertenecen a la humanidad, y por lo tanto a todos los hijos de Dios. La verdad espiritual no es propiedad de los espiritas u otros que profesan estas enseñanzas y, tal vez, porque ya es hora de la Iglesia Católica admitir, públicamente, la existencia espiritual, la vida después de la muerte y la comunicación entre los dos mundos.
En la entrevista con Dom Helder Camara, realizado por los editores, el Espíritu comunicante respondió a las siguientes preguntas acerca de la vida espiritual:
P) -¿Dom Helder, mismo en la vida espiritual, usted se siente un sacerdote?
R) -No podría dejar de sentirme sacerdote, porque mi alma, aun antes de regresar, ya se sentía un sacerdote. Al dejar la existencia en el cuerpo físico, continuo aún como sacerdote porque pienso y actúo como un sacerdote. Mi convicción en la Iglesia Católica sigue siendo la misma, ampliada por supuesto, con las enseñanzas que aquí recibo, pero me mantengo firme junto a mis hermanos de clérigo a contribuir en aquello que me sea posible, para el bien de la humanidad.
P) ¿Del otro lado de la vida el Sr. tiene alguna facilidad para realizar su trabajo y expresar sus pensamientos, o todavía encuentra muchas barreras con el preconcepto religioso?
R) Encontramos muchas barreras. Las personas que están de este lado reproducen lo que existe en la Tierra. Los mismos grupos que se forman aquí se reproducen en la Tierra. Tenemos las mismas dificultades de relacionamiento, porque los pensamientos continúan firmados, cristalizados en las creencias sobre ciertos puntos que no conducen a nada. Resisten a la idea de evolución de los conceptos. Pero la gran diferencia es que, por estar con la vestidura del espíritu, teniendo una conciencia más ampliada de las cosas podemos dirigir nuestros pensamientos de otra manera y así influenciar a aquellos que están en la tierra y que vibran en la misma frecuencia.
P) ¿Cómo el Sr. esta auxiliando a nuestra sociedad en la condición de desencarnado (sin cuerpo físico)?
R) De la misma manera. Nosotros tenemos las mismas preocupaciones con aquellos que pasan hambre, que están en los hospitales, que son tratados injustamente por el sistema que sustrae libertades que enriquecen a unos pocos y colocan en la pobreza y en la miseria a todos aquellos desfavorecidos por la suerte. Nos unimos a todos los que piensan de manera similar a nosotros, en tareas ennoblecedoras, intentando colaborar para el mejoramiento de la humanidad.
P) ¿Cómo es su rutina de trabajo?
R) Mi rutina de trabajo es más o menos lo mismo. Me levanto, porque aquí también se descansa un poco, y vamos a desarrollar las actividades para las cuales nos colocamos a disposición. Hay diferentes grupos de trabajos que son organizados para el medio católico, para aquellos que necesitan de alguna colaboración. Para eso nos dividimos en grupos y yo me encajo en algunas actividades, las cuales hago con mucho gusto.
P) ¿Cuál fue su mayor tristeza después de desencarnado? ¿Y cuál fue su mayor alegría?
R) Yo ya tenía la convicción de que estaría en el seno del Señor, y que no dejaría de existir. Poder reencontrar los amigos, los parientes, aquellos a los cuales dedicamos el máximo de nuestro aprecio y consideración y seguir trabajando, es una gran alegría. La alegría de trabajar para nuestro Señor Jesucristo.
P) ¿El Sr. después de desencarnado, ha estado con frecuencia en los Centros Espíritas?
R) No. Los lugares más comunes que visito en el plano físico son los hospitales, las casas de salud, son lugares donde el sufrimiento humano se hace presente. Naturalmente voy a la iglesia, conventos, a seminarios, reencuentros con amigos, principalmente en los sueños, pero mi permanencia más frecuente no es en la casa espírita.
P) ¿El Sr. ya era reencarnacionista antes de morir?
R) Nunca fui reencarnacionista, dígase de paso. No tengo sobre ese tema un trabajo más desarrollado ya que ese es un tema delicado, tanto es que enfaticé muy poco en el libro. Lo que puedo decir es que Dios actúa de acuerdo con su sabiduría sobre nuestras vidas y que nuestro gran objetivo es buscar la felicidad a través de la práctica del amor. Si es necesario volver a tener nuevas experiencias, eso será un proceso natural.
P) ¿Cuál es su objetivo al escribir mediúmnicamente?
R) El cambio, o al menos contribuir para cambiar la visión que las personas tienen de la vida, para que ellas entiendan que continuamos a existir y que esta nueva visión pueda cambiar profundamente nuestra manera de vivir en la tierra.
P) ¿Cuál fue la sensación con la experiencia de la escrita mediúmnica?
R) Mi intento de adaptación a esta nueva forma de escribir fue muy interesante, porque al principio yo no sabía exactamente cómo adaptarme al médium para poder escribir. Es necesario que haya una aproximación muy grande entre el pensamiento que tenemos con el pensamiento del médium. Es ese el gran reto para todos nosotros, porque el médium necesita expresar aquello que estamos intuyendo. Al principio fue difícil, pero poco a poco empezamos a crear una misma forma de expresión y de pensamiento, ahí las cosas mejoraron. Otros (médiums) por los cuales intento comunicarme enfrentan problemas semejantes.
P) Fue una sorpresa saber que podía comunicarse por la escrita mediúmnica?
R) No, porque yo sabía que muchas personas portadoras de mediumnidad hacían eso. Yo apenas no me especialicé, no busqué mas detalles dejé eso para después, cuando hubiera tiempo y oportunidad. Imaginamos que hay otros sacerdotes que también quieren escribir mediúmnicamente para, relatar sus impresiones de la vida espiritual.
P) ¿Por qué Dom Helder es quien está escribiendo?
R) Porque yo pedí. Me vi con la necesidad de expresar a mis hermanos de la Tierra que la vida continúa y que no paramos simplemente cuando nos ponen dentro de un cajón y nos dicen todo “se acabo”. Yo ya pensaba que continuaría existiendo, sabía que habría algo después de la vida física. Hablé eso muchas veces. Entonces sentí la necesidad de expresarme a través de un médium cuando yo estuviera en condiciones y me fueran dadas las posibilidades. Y es esto lo que estoy haciendo.
P) ¿Otros sacerdotes están queriendo escribir mediúmnicamente en nuestro país?
R) Sí, y no son pocos. Son muchos aquellos que quieren utilizar la pluma mediúmnica para poder expresar la sobrevivencia después de la vida física. No lo hacen por puro preconcepto de ser ridícularizados, de no ser aceptados, y guardan sus sensibilidades espirituales para no ser colocados en una situación de incomodidad. Muchos sacerdotes y cardenales en la tierra, hasta que sientan la protección espiritual en sus reflexiones, en sus prédicas, pero creen que es el Espíritu Santo. Y en realidad son hermanos espirituales que tienen con ellos algún tipo de aprecio y colaboran en sus actividades.
P) ¿Cómo el Sr. se sintió al interactuar con el médium Carlos Pereira?
R) Muy a gusto, pues había una afinidad, y porque él se puso a disposición para el trabajo. Al principio fue difícil para mí ajustarme a él debido a sus intereses y también por su trabajo. Cuando estuvimos de acuerdo en la forma de actuar, todo fue muy fácil, ya que, en otro momento, el empezó a investigar sobre mi última vida física. Así me fue más fácil transmitirle las informaciones que hicieron el libro.
P) ¿Cree usted que la Iglesia Católica irá a aceptar sus palabras dictadas a través de un médium?
R) No tengo esta pretensión. Sabemos que todo va a evolucionar y que un día, inevitablemente, todo el mundo va a aceptar la inmortalidad con naturalidad, pero es demasiado imaginar que un libro pueda revolucionar la forma de pensar de nuestra Iglesia. Creo que tendremos críticas, vehementes, pero algunos más sensibles admitirán las comunicaciones. Este es nuestro propósito.
P) ¿Es cierto que usted tenía algunos pensamientos espíritas cuando estaba en la vida física?
R) Yo no diría espírita, diría espiritualista, porque nuestra iglesia por sí sola, ya predica la supervivencia después de la muerte. Luego hacer contacto con el plano físico después de la muerte sería una consecuencia natural. Pensamientos espíritas no eran, porque yo no soy espírita. Digo sin ningún tipo de vergüenza haber negado algunos pensamientos espíritas, lo que digo es que llegué a tener, en ciertas ocasiones, experiencias intimas espirituales.
P) ¿La iglesia Católica, tiene las mismas jerarquías en el mundo espiritual?
R) No exactamente, pero reconocemos nuestros hermanos que tuvieron responsabilidades mayores que notoriamente tienen un grado evolutivo moral muy grande. Los seres del lado de acá se reconocen rápidamente por su, lucidez, por su moralidad. No quiero decir que esto no ocurre en la Tierra, pero en este lado de la vida esto es todo más transparente, nosotros captamos la realidad con más intensidad. Autoridad aquí no se hace sólo con una posición transitoria que se tuvo en la vida terrena, pero si por su progreso moral.
P) ¿Cuál es su pensamiento sobre el papado en la actualidad?
R) Este tema es muy polémico. Estar sentado en la silla de Pedro, representando el pensamiento mayor de nuestro Señor Jesucristo, es una gran responsabilidad para cualquier ser humano. Así queda muy fácil para nosotros que estamos afuera, atribuir para quien está sentado allí, algún tipo de consideración. No es fácil. Quién está ahí tiene numerosas responsabilidades, no sólo material, he descubierto qué las espirituales son en mayor grado. Yo puedo tener una visión ideológica de cómo podría ser la organización de la Iglesia, defendí eso durante toda mi vida. Pero tengo que admitir, aunque, creo en esta visión ideal de la Santa Iglesia de que las transformaciones que debemos pasar merecen cuidados porque no podemos dar saltos en la evolución. Quiera Dios que el actual Papa Ratzinger (Benedicto XVI) pueda tener la claridad necesaria para poder conducir a la Iglesia al destino que ella se merece.
P) ¿El Sr. tiene alguna sugerencia para hacer que la Iglesia cumpla su función?
R) No necesito decir más nada. Lo que dije en la vida física refuerzo. Quiero apenas decir que cuando estamos de este lado de la vida, tenemos una visión más amplia de las cosas. Ciertas posiciones que tomamos pueden no estar en su mejor momento de implantación, especialmente por una conjunción de factores que vemos aquí. Esto no quiere decir que no debemos tener nuestros ideales y siempre que sea posible, ponerlos en práctica.
P) ¿Espiritistas en el futuro?
R) No tengo ninguna duda. Estas enseñanzas no pertenecen a nuestra iglesia, o de otros que profesan estas enseñanzas espirituales. Por lo tanto, tarde o temprano, nuestra iglesia tendrá que admitir la existencia espiritual, la vida después de la muerte, la comunicación entre los dos mundos y todos los demás principios que surgen naturalmente de la vida espiritual.
P) ¿Cuáles son los nombres más conocidos de la Iglesia, que están cooperando con el progreso de Brasil en el mundo espiritual?
R) Enumerarlos sería una injusticia, ya que hay bases en todos las localidades. Entonces, decir un nombre u otro, sería una referencia puntual porque hay muchos que son poco conocidos, pero que desarrollan de este lado de la vida un trabajo fenomenal y nosotros nos adherimos en estas iniciativas de amar al prójimo.
P) Respecto al amor. ¿Qué mensaje les daría específicamente a los católicos ahora, después de la muerte?
R) Que amen, amen mucho, porque sólo a través del amor, será posible traer un poco más de tranquilidad al alma. Si no tratamos de amar desde el fondo de nuestro corazón, todo se convertirá en una profunda angustia. El amor, como nos enseñó Nuestro Señor Jesucristo, es la clave para la salvación de la humanidad.
P) ¿Qué mensaje el Sr. dejaría para nosotros, los espíritas?
R) Que amen también, porque no hay división entre católicos y espiritistas o cualquier otra creencia en el seno del Señor. Esta división es hecha por nosotros, no por el Creador. Son aceptables porque muestran las diferencias de puntos de vista, sin embargo, la convergencia es única, aquí simbolizado por la práctica del amor, porque todos tenemos que unir nuestros esfuerzos para que exista la paz en el mundo y en nuestros corazones.
P) ¿Qué mensaje el Sr. dejaría para los religiosos de una manera general?
R) Que amen. No hay otro mensaje solamente el mensaje del amor. Este es el único mensaje que podemos dejar para todos.
Autor: Dom Helder Camara (espíritu) Médium: Carlos Pereira
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"El deber de cada uno no es solamente amar a los demás. Es sobretodo llegar a ser digno de ser amados por todos".
Benedito Carlos G. Salgueiro.
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¡Hijos e hijas del alma, manteneos en paz!
Oíd lo que os fue dicho: amareis a los que os aman y odiareis a aquellos que os odian. ¡Yo sin embargo os digo: amad a vuestros enemigos para ganar el galardón del Reino de los Cielos.
En otras palabras, Jesús nos invita a la renuncia total de los sentimientos egoístas, incitándonos con la bendición de la legítima fraternidad.
Nos dio ejemplo, el mismo, amando a los adversarios del Bien, de que El era la representación máxima en la Tierra.
Ese desafío permanece hace veinte siglos, invitándonos a profundas reflexiones.
En la actualidad, cuando las comodidades confraternizan con la avaricia, la deslealtad, el soborno, las criaturas se aman por los intereses que les dicen al respecto especialmente en relación a las subalternas pasiones.
No pocas veces, quedáis aturdidos ante el mundo devorador y la rectitud del comportamiento espirita.
Tened, sin embargo, buen ánimo y sed fieles a la fraternidad que debe regir entre todos porque de ella parten los nobles sentimientos de la solidaridad, de la compasión, de la caridad: los dilectos hijos del Amor..
Preocuparos con las directrices de seguridad para el futuro de nuestro Movimiento y en actuar con sabiduría bajo la inspiración superior.
Id trazando las metas que deben ser alcanzadas de forma que contribuyáis en pro del mundo mejor de mañana. Más no os olvidéis de que la simiente del Evangelio de Jesús es perenne luz guiando a la Humanidad su destino sublime.
Son días, estos, de inquietud y de desafíos. Las inquietudes forman parte de las crisis y toda crisis vivenciada abre puertas al progreso porque hace madurar a los luchadores. Y, al mismo tiempo, a través de los desafíos se desenvuelven las facultades de discernimiento para la acción correcta según las determinaciones del Maestro incomparable.
Tambien El vivió en el momento histórico de crisis internaciones, socioeconómicas, de variada naturaleza, y fue gracias a esas crisis que Él aceptó el desafío de implantar en la Tierra el amor.
¡Observad! Es la única personalidad que exalta el amor capaz de vencer dos milenios de luchas y se transforma en más eficaz psicoterapia de que necesita la criatura humana.
El amor, sin embargo, de entrega total, sin los vicios de los intereses recíprocos, de las ofertas retributivas, más el sentimiento de oferta por el ideal de la Vida Eterna.
Vivís el grandioso momento de la transición que impone directrices seguras de comportamiento para que los apéndices de fugas psicológicas no os desvíen de la segura directriz para el encuentro con la Verdad.
Porfiad, hijos e hijas, no pocas veces, con el corazón destrozado, más el alma aceptando los impositivos del progreso y viviendo el anonimato de larenuncia, para que brille el Señor y no el ego individual.
Es ciertamente el gran desafío del momento servir a la Causa sin servirse de la Casa y de la Doctrina que ella alberga. Comprender que, en la condición de siervo, la satisfacción máxima es atender a las determinaciones del Señor sin cualquier queja o reclamación.
Aquellos que vinieron antes y dejaron pisadas luminosas para que siguieseis están preparándose para el retorno a fin de avanzar por las trillas que ahora trazáis.
Alegraos, hijos e hijas del alma, por manteneros fieles al Cristo de Dios, muchas veces con desagrado por nuestros afectos queridos, de aquellos que participan de nuestras alegrías y dolores, más no tienen naturalidad para comprender los sentimientos que entregáis al Guía Protector de todos nosotros.
¡No desanimaros nunca!
Tolerancia, pero no connivencia.
Fraternidad, mas, de ninguna manera, vulgaridad en el comportamiento.
Trabajo dentro del límite de las fuerzas, porque aquel que hace lo que puede, realiza el máximo.
Vuestros mentores espirituales y vuestros devotados amigos del más Allá estamos puestos para que los emprendimientos libertadores sean bendecidos por el Señor y puedan tornarse realidad en la construcción de la Era de la legítima fraternidad
Los Espíritus espiritas, que estamos con vosotros, proseguiremos en la santa lid de edificar el Reino de los Cielos en cada corazón, a fin de que se expanda por toda la Tierra, a medida del tiempo que se le haga necesario.
Jesús triunfará sin cualquier restricción, pues Él es el Camino para la Verdad y para la Vida.
Que El nos bendiga a todos y nos guarde en su dulce paz, son los deseos del servidor humilde y paternal siempre.
Por el Espíritu Bezerra de Menezes – Mensaje psicofónico por el Médium Divaldo Pereira Franco, en el cierre de la reunión ordinaria del Consejo Federativo Nacional, en Brasil en la mañana del 10 de noviembre del 2013.
Traducido por Mercedes Cruz Reyes.
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