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miércoles, 20 de abril de 2011

Aniversario del Libro de los Espíritus




    Con la salida de “El libro de los Espíritus” el 18 de Abril de 1857 en la librería del Paláis Royal de Paris, se empezaron a propagar 
por todo el mundo 
estas nuevas enseñanzas y con ello abrieron sus puertas miles de centros espíritas por todos los lugares del mundo.
Aunque este año el Espiritismo cumplió 154 años, no es agua pasada, es Actualidad, están ahí al alcance de todos, sus libros, sus enseñanzas, los amigos espíritas, las federaciones, sus páginas web y,  ¿sabéis cual es su objetivo? Hacer el bien por el bien mismo. Ningún espírita os pedirá nada a cambio, ni si quiera que creáis en lo que dicen, porque para creer o hablar de algo lo mejor es conocerlo uno mismo en profundidad, para después poder juzgar y valorar si aquello que se dice o se lee es aceptado por la razón. Allan Kardec tenía un lema : “Entre cien conceptos que se nos presenten, más vale rechazar noventa y nueve verdades  que aceptar un solo  error”.


     El espiritismo lleva 150 años aportando luz a la humanidad para que podamos comprender por nuestros propios medios el auténtico significado del evangelio de Jesucristo; la buena nueva de la trascendencia espiritual más allá de nuestras limitaciones físicas, derribando las barreras que nos impiden aceptar la realidad y bajo la luz de la razón y con los criterios de la ciencia, el saber espírita aporta el complemento necesario para que las piezas del puzle de la vida encajen perfectamente.

     Espiritismo es una palabra creada por Allan Kardec -seudónimo adoptado por Hipólito León Denizart Rivail, renombrado pedagogo francés del siglo XIX, discípulo de Pestalozzi- para designar una nueva doctrina y diferenciarla de otras corrientes espiritualistas.

     Y decimos nueva, porque a partir de Kardec, y con él, el conocimiento espírita se estructuró y se organizó en un cuerpo de doctrina, en base a unos conocimientos, que si bien algunos de ellos convivieron con la evolución humana, Kardec les imprimió un orden, una estructura específica.

     Kardec lo definió así: "El espiritismo es la ciencia que trata la naturaleza, origen y destino de los espíritus y de sus relaciones con el mundo corporal.  Es a la vez una ciencia de observación y una doctrina filosófica. Como ciencia práctica, consiste en las relaciones que pueden establecerse con los espíritus, como doctrina filosófica, comprende todas las consecuencias morales que se desprenden de semejante relación".

     Es así que gracias al encuentro de un conocimiento con un hombre honesto, positivo, conocedor del método científico de la investigación, con una sólida trayectoria en la docencia y un conocido prestigio como pedagogo, como el Espiritismo pasa de la fenomenología del entretenimiento, al de ser una Doctrina Filosófica, moral, con un contenido científico y de bases universales.

     Su estudio y conocimiento demanda tiempo, análisis, reflexión, porque no sólo es un conocimiento que se incorpora a nuestro intelecto, sino fundamentalmente a nuestro sentir, que promueve cambios en nuestra personalidad, dando lugar a toda una filosofía y estilo de vida a partir de la profundización y el análisis de la problemática del hombre y la sociedad, el móvil del progreso, los mecanismos de las Leyes Divinas y el objetivo trascendente de la existencia.

     El día 18 de Abril, hemos conmemorado  la aparición  de “El Libro de los Espíritus” y la mejor forma de celebrarlo es leyéndolo, estudiándolo,  analizándolo. Porque no podemos emitir un juicio sin  saber ni conocer nada del asunto, pero tampoco podemos beneficiarnos de su contenido, si no tomamos conocimientos de sus enseñanzas, si las ignoramos.

     Procuremos beber de esta fuente inagotable, de sabiduría, porque gracias a su agua, todos podemos adoptar nuevos formas de vida, de comportamiento, y de ver todas las cosas desde un punto racional y lógico, sin misterios, sin milagros, sino con la voz de la razón y el buen sentido,  la de los Espíritus del Bien.

No olvidemos nunca que el Espiritismo, tiene:

Por bandera la Paz.
Por lema el Amor.
Y como objetivo el Bien.

     Hagamos una Oración por Kardec, agradeciendo su labor incansable y tenaz en las filas del Espiritismo, como Maestro y Codificador de la Doctrina, merece nuestro amor, nuestro cariño, y sobre todo nuestro respeto.

     ¡Que Dios lo Bendiga! Y que nos permita seguir a su lado, divulgando su Doctrina,y porque  a Jesús, el Maestro de los Maestros, debe estar a Su lado, nos permitimos darle las gracias  por darnos a través de él, luz para caminar en nuestro peregrinaje en la Tierra.

     Divulguemos el “Libro de los Espíritus”  El es la Luz por la cual nos podemos conducir y la cual debemos pasar a todos nuestros hermanos para que ellos se beneficien también.

Mercedes Cruz

( Podéis visitar el otro blog:   inquietudesespiritas.blogspot.com